Las hadas tienen gusto de embromar y juego,
Bailan y entretienen,
Cosquillean las barbillas y las narices,
Como burbujas en champán.
Los ángeles son más serios,
Hacen cosas resistentes,
Como la facilitación de miedos y el barrido de los rasgones,
Y abrazando con sus alas.
Los ángeles son asignados por God,
Demuestran muy raramente,
Ven a las hadas algunas veces en sueños,
Y, en la voluntad, vienen y van.
Las hadas viven en fantasías,
Son cosas pequenitas, minúsculas,
Revolotean alrededor irregularmente,
En las alas delicadas del hilo de araña.